Era el cumpleaños de Pili, la madre de Borja, y Borja le quería hacer una tarta y cómo nos habíamos quedado con las ganas de probar la tarta super chocolateada que le habíamos hecho a Raquel... pensó que podíamos hacersela a su madre que seguro que estaba encantada.
Era un layer cake de chocolate, relleno y cubierto de crema de mantequilla de chocolate intenso, y madre mía como estaba Raquel y sus amigos tenían razón.... estaba buenísima y no era tan potente como aprentaba, bueno...potente era pero no para llegar al punto de empalagar.
Hasta los camareros del restaurante nos dieron la enhorabuena, ya que el trozo que sobró se lo dejamos para que lo probaran por agradeciemiento de habernos dejado comer la tarta allí.
Muchas felicidades Pili... para el año que viene te haré el helado, que te dejaré elegir el sabor y todo jejeje. ( es que Borja y yo siempre la estamos chinchando cuando hacemos helado y no le damos porque le decimos que hemos hecho poco y se nos gasta jajaja, si fuera otra cosa siempre damos pero el helado....es sagrado jejejeje.)
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