Sin ninguna duda llegaba el día más importante para mí,era la comunión de mi sobrina Mar,y nos teníamos que lucir,aunque fuera por merito propio,tenía que ser la mejor tarta que habíamos hecho hasta el momento,que mi sobrina se quedara con la boca abierta y se sintiera orgullosa de su tíos.
En una fecha tan especial,decidimos arriesgar (como siempre)y hacer una tarta de pisos,que nunca habíamos hecho,y nada más y nada menos que nos lanzamos con una de 3.
No teníamos muy claro lo que íbamos a hacer,lo que quería era que fuera de las monster high,muy colorida y que llevara un papel de cebra comestible que había comprado hace un tiempo y que guardé para esa tarta.
Quedó impresionante,muy bonita,Mar se quedó alucinada cuando la vio y fue la envidia de todas sus amigas,los mayores también fliparon con la tarta,todos rodeándola y haciendoles fotos y alguno dudaba si se podía comer o no...que hasta que no lo comprobaran,no se lo creerían jeje.
Las 12 horas de trabajo,sí, 12 horas, merecerieron la pena con la pedazo de tarta que nos quedó fue una pasada.
Sólo me queda darle todo el merito a Borja,que debido a mis horios de trabajo...fue él,el que se curró la tarta y el que se pegó 4 horas poniendo cuadrito a cuadrito el piso de abajo,muchas gracias amor,sin ti no habría quedado tan espectacular y gracias por currartela tanto ya que sabías que era muy importante para mí.



No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por vuestros comentarios :)